miércoles, 28 de enero de 2015

AGRADECIMIENTO A UNA FARMACIA MUY ESPECIAL



Hola soy Paqui. Hoy os voy a escribir de una farmacia muy especial. Pensareis que tendrá de especial. Os diré una cosa, no todo el mundo sirve para estar de cara al público. La farmacia está situada en el Arrabalejo llamada Eduardo, Agudo, Aponte están los cuatro trabajadores que son: Mari Mar, Susana, Carlos y Pepe. Veréis, son cuatro personas especiales porque todos sabemos a lo que vamos, pero entras y es como si fuera una pequeña familia. Muchas veces no nos damos cuenta que las personas si supiéramos escuchar unos minutos y ellos tienen el don de escucharnos. Yo soy una clienta que se siente agradecida a estos cuatro trabajadores, porque en un momento de mi vida duro, pues me encontré a mi suegro muerto de un infarto y una de las veces que fui me eche a llorar, porque sabían que estaba mal y por varias circunstancias me entraron dentro de la farmacia, me escucharon desahogarme. Me sentí arropada por ellos y como yo, muchos clientes sin desmerecer a los demás. Siempre vamos buscando a pepe, pero todos son iguales, son todos buena gente. Sobre todo ves a las personas mayores contándoles sus problemas y no tan mayores, te animan y sales de la farmacia con otra perspectiva, aunque estés mala te sacan una sonrisa. Yo conozco a una señora que se mudo al Camarín de Jesús y cuando pasa por la farmacia se para como si fuera a ver a unos amigos y es que el trato hacia nosotros, los clientes, se agradece mucho. Estamos faltos de cariño hacia los demás. Que cuesta poner tu mejor cara a las personas que van, pero ellos les salen del corazón porque son muy buenas personas. Hoy día necesitan que les presten un poco de su tiempo, aunque los están atendiendo. Ellos preguntan cómo te va, tú le cuentas y se crea un vínculo entre cliente y trabajador que ya quisieran muchos. Hay sitios que vas y ya no vuelves, pero la farmacia hay gente buena y nos conocemos. Nos preguntamos entre unos y otros. Quiero hacer un reconocimiento y agradecimiento a estos cuatro trabajadores por el trato a sus clientes, por ser tan humanos y delicados hacia nosotros. Una clienta agradecida. Un abrazo de todo corazón Mari Mar, Susana, Carlos y Pepe. Gracias por ser como sois.
Paqui Cámara González

GRACIAS A DON JUAN ESPEJO Y A SU EQUIPO DEL PERIÓDICO JAÉN



Hola soy Paqui. Hoy voy a dar las gracias y felicitar la navidad a don Juan Espejo y a su equipo de trabajadores. Don Juan como no hay manera de pillarle por teléfono pues lo hago así. Quiero agradecerle que dios le haya puesto en mi camino. Usted confió en mí y llevo más de dos años escribiendo, pero el merito es de una persona que ha confiado en mi escritura y me ha dado la oportunidad de expresar lo que siento. Todos mis escritos están hechos desde el corazón, pero sin usted, no hubiera llegado a la gente de apié. Dios pone obstáculos en la vida y para mí, no es fácil la que llevo de un tiempo hacia aquí, pero la vida te pone personas buenas en el camino y te dicen algo bueno. Hare para que me publiquen mis escritos. Don Juan, quiero darle mil gracias a usted y a los que componen el periódico Jaén, hasta las limpiadoras que también tienen derecho darles mis felicitaciones. Les deseo feliz navidad y un prospero año mejor que este, pues no ha sido un buen año, pero estamos vivos que no es poco y espero que usted siga confiando en mi escritura, ya que eso me da ánimos. Les deseo a usted y a su familia lo mejor, gracias de todo corazón una mujer que le estará agradecida toda la vida por la oportunidad de publicar lo que escribo y sentir que gusta lo que hago. Espero a que reciba el cariño que se merece de todo el mundo al que usted escucha. Gracias, feliz navidad y que dios le guarde muchos años de salud y a todos los demás igual, de todo corazón por confiar en mí. Un abrazo para usted y a su equipo que se lo merecen por estar al lado de las personas de apié de calle.

Paqui Cámara González

MI REPULSA Y MI INDIGNACIÓN HACIA LOS ATENTADOS DE PARÍS



Hola soy Paqui. Hoy os voy a escribir sobre un tema que la verdad, no me gustaría escribir y no quiero volver a ver que se repita esto otra vez. Es sobre los atentados de París. Que crueldad tan grande, como se puede poner a un país en tres días blindado de policías por gente tan mala, que ha tenido a todo el mundo pendientes de estos atentados injustos. Yo no puedo entender desde mi ignorancia, pero si de la maldad de la gente está que ha sembrado el pánico y de las personas que se le ha quitado la vida, inocentes por expresar libremente lo que sienten. Ha donde vamos a llegar, que ya no podamos expresar lo que sentimos cada uno. Pero que se han creído, que son los jueces y verdugos para matar a las personas con esa frialdad, que de verdad deberían vigilar con cuidado a ciertos sujetos, porque esta gente muere pero se llevan todas las vidas por medio, sin importarles nada. No tienen sentimientos y eso de que matan por un dios, un dios no quiere una matanza semejante. Cada uno es libre de creer en el dios o la religión que quiera, siempre que no se haga daño a nadie y estos se llevan todas las vidas que puedan. Esto es como una secta que les lavan el cerebro y los reclutan solo para matar y los pobres periodistas que hacían su trabajo. Desde la libertad que tenemos de pensar y expresarnos y si no les gusta, pues que no lo lean y el que no le guste un programa, que cambie de canal, pero de ahí a matar por unas caricaturas, o lo que sea, me da igual. No nos deben callar. Estamos hartos de callar. Yo perdí mi trabajo por decir cómo me sentía y la gente se deja manipular por los demás. Ellos hacen lo que ellos quieren, pero en el momento que tu abres la boca, a la calle. Pero perder la vida por expresar lo que uno hace en su trabajo y le cuesta la vida. Ya esto es imperdonable. Esta masacre no tiene perdón y no nos van a callar. Ya está bien de silenciarnos. Por eso mis condolencias y mi apoyo a todos los que han perdido la vida injustamente, por asesinos sin piedad y a sus familias, mi más sentido pésame. El mundo entero está con París y no nos callaran desde la libertad de expresión. Apoyemos a todos. Mi repulsa y mi indignación hacia esta gente. Un beso para las familias.

                                                                                                                            Paqui Cámara González

QUE VERGÜENZA QUE ROBEN HASTA EN LOS BANCOS DE ALIMENTOS



Hola soy Paqui. Sobre el tema que voy a escribir hoy, la realidad supera a la ficción. Hay algunas cosas que no puedo entender ni entenderé en la vida y más en los tiempos que estamos pasando, que hay muchas familias que van a pedir para poder comer y la vergüenza que pasan por tener que llegar a la situación de pedir, pero es la cruda realidad que haya personas que se lucren de esto es inconcebible. El otro día vi en televisión que habían robado en un banco de alimentos. Que fuerte me parece, pero más fuerte fue el autor del robo. Un hombre de noventa años, que estuvo trabajando con ellos y dando a familias alimentos y otros dos hombres para sus comercios. Qué vergüenza. Ya no se respeta nada. Esto es una crueldad que haya miles y miles de familias que lo están pasando mal y otras buenas familias que la mayoría son ancianos, con pagas muy pequeñas y donan comida con paquetes leche etc. lo que pueden, para que luego unos sinvergüenzas lo roben. De verdad que deberían hacerles pagar el valor de lo robado: ocho mil euros, que se dicen poco y sobre todo a este hombre de noventa años y a los dos con negocios, vergüenza les deberían de dar por quitarles el pan a miles de familias que piden para comer. De por sí ya les cuesta la situación que viven y tienen que pasar por caritas o otros sitios para que les puedan ayudar a sus familias, para que haya unos desalmados y roben en el banco de alimentos para lucrarse. Por suerte, es un caso aislado, porque los bancos de alimentos y caritas en algunos sitios no tienen para abastecer a tanta demanda, así que aprovecho la ocasión y pido por favor a las buenas personas que puedan, que ayuden con lo que buenamente puedan. Se lo agradecerán los voluntarios y organizaciones que buscan poder alimentar a estas familias y no se queden con este sabor amargo de este caso, que por suerte es aislado. Gracias a todos. Cuanto puedan ayudar será bien recibido a caritas o iglesias u otros lugares. Un beso y no vuelva a pasar esto mas, tengamos un poco de humanidad.
                                                                                                                                                 Paqui Cámara González

INJUSTICIA A LAS MALDITAS PASTILLAS TALIDOMIDA



Hola soy Paqui. Voy a escribir y opinar desde la ignorancia, pero no desde la injusticia. El otro día vi en televisión personas que estaban protestando porque se les había aprobado unas indemnizaciones y ahora se les había denegado. La verdad que es inhumano hacer estas cosas, porque bastante tienen sus madres y ellos que están pasando, porque un medicamento la talidomina, les causo serios problemas que son malformaciones y muy graves. Las madres que se tomaban el medicamento en sus embarazos, las pobres sin saber que causaría estos daños tan graves, porque las madres que se quedan embarazadas el pensamiento es independientemente si le gusta niño o niña, es que salga sanos sin problemas y cuando nace con estas malformaciones, la culpa que se les queda a esas madres por haber tomado esas malditas pastillas y ese peso se les quedara toda la vida y la culpa de pensar que si no la hubiera tomado su hijo o hija, no estaría así y ahora que habían luchado para conseguir unas indemnizaciones para darles una calidad de vida más llevadera, se encuentran que la habían aprobado y después se la han denegado. De verdad que hay varias cosas que no puedo entender. Es un daño irreparable para estas familias y ahora se llevan otro mazazo que lo que habían conseguido se ha quedado en nada. Tanta lucha para nada. ¿Qué les quedara a estas personas que sus madres lucharon desde el día que los trajeron a esté mundo con la injusticia de saber que no han podido llegar a conseguir el futuro de sus hijos? Muchos se han quedado en el camino y los que quedan, se sienten olvidados por una sociedad que no a echo justicia con estas familias, por eso mi más sincero apoyo y espero que lo consideren de nuevo y les den las indemnizaciones que piden, que se las merecen, que ellos no quisieran verse así, pero ya que se les ha causado el daño que lo reparen dentro de sus posibilidades para que pueda ser un poco más llevadero y terminar la lucha de estas familias. Un abrazo de una mujer que desde mi ignorancia ha querido poder ayudar, si es que esto vale para algo. Gracias, un saludo a todos.
Paqui Cámara González